Se toma como el nacimiento de la Guerrilla Urbana el Robo al Policlínico bancario sucedido el 29 de Agosto de 1963. Por lo cual toda la historiografía contemporánea fija en la relación con Baxter, Santucho y Nell y lo que sucediera entorno a ellos la historia de los jóvenes que quería cambiar al mundo. Lejos de cuestionar lo escrito. Mi pregunta es esta ¿Que sucedió entre 1955 y 1963?: ¿Solo había revolucionarios a partir de esa fecha y de ese tinte? ¿La situación que ellos generaron derivaría en un movimiento como el Montonero, que en realidad no creía en la democracia y veía en la lucha armada el único medio para la obtención del poder? Es inútil explicar que a mi criterio, durante esos años, existió otra resistencia peronista, de otro carácter y otra ideología. De compromiso social y de lealtad al Gral. Perón. Que en realidad, hechos y circunstancias de la historia, su condición social, su naturaleza de hombres de acción, no les permitió como a estos grupos revolucionarios, escribir tantos testimonios. Pero esta resistencia, no fue menos heroica, fue tan combativa y perseguida al punto, que los mismos escritores tratan de olvidarla. Para que esos años, que, en periodos históricos tan laxos como ocho años, se pierdan y parezca a los lectores ,sin tanta apertura cronológica, que el país hubiera estado en el freezer, durante ocho años, para resucitar de la mano de los muchachos de la clase media que robaban para preparar las formaciones especiales. Sus vidas aparecen plagadas de viajes y entrevistas como que Baxter fue condecorado por Ho Chi Ming en Vietnam. Pero nadie dice del hombre de los Textiles, a quien el Gral., Perón le pidió que renuncie a ser Secretario General de su gremio, para permitir que Framini fuera su Secretario General para no tener cuestionamientos de las 62 Organizaciones cuando se proyectaba como candidato a gobernador en la Provincia de Buenos Aires, este hombre se llamo José Manuel Mendoza, y el Negro Mendoza, lo mando Perón a recorrer a Cuba y los países detrás de la Cortina de Hierro. Así que residió en Cuba donde conoció a Fidel Castro, estuvo con Torrijos en Panamá, con el Mariscal Tito en Yugoslavia, con Kruschev en la Urss, Coceuscu en Rumania. Y retorno a la Argentina cuando volvió Perón en 1973 siendo nombrado por Perón enlace entre la CGT y el Banco Hipotecario. He ahí un dato, ¿que habían hecho los Textiles en la resistencia?. O ¿quien conoció el Sindicato de Rosario de la Carne, no vio el bunquer que debió ser construido con pasadizos secretos, para hacer las reuniones que tanto molestaban a los comandos civiles y al ejército?.
En fin, esto no esta escrito, se lo lleva la misma ola y me parece injusto.
5 comentarios:
Amigo Hard, ya lo recordamos en otra oportunidad pero hablando de la primera Resistencia Peronista creo que no está de más el link a las memorias de Rolando Hnatiuk.
http://www.relatosdelperonismo.com.ar/historia.htm
Ah, una maravilla el nuevo look. Un abrazo.
Si jorge, es cierto, pero creo que estoy haciendo una busqueda mas sistematica de cosas, solo escribo sobre lo que ya hable, ud lo ha dicho claramente, pero voy revisando y hablando con cumpas de la epoca y salen temas para ir buscando alternativas, pero es todo denso, no hay, creo que esa generacion se dejo estar.
HARD
Es cierto, todo es muy fragmentario, quizás debido a la situación de la época.
Pero convertir en un agujero negro el periodo 56/66, es hacerle un favor al enemigo.
Para las nuevas generaciones, pasamos de José León Suárez, a la imagen del Lobo Vandor presenciando la Asunción de Ongania.
Toda la historia de las 62 omitidas, el retorno del 64 es una nota a pie de página.
Llenar el vació como se pueda, es una tarea fundamental.
Un abrazo Maestro
manolo:
Si bien debute contra Geronimo Izetta y contra Vandor, el tiempo me dio en medirlos en forma diferente. Entre traiciones y lealtades, entre necesidades y locuras, se pueden ver cosas distintas en de la época, como el apoyo de Vandor a Serú Garcia y la llegada de Isabel para marcar el campo. Es evidente que Vandor se lo puede mirar desde dos puntos de vista (es decir muchos) pero basicamente dos: La escuela sindical la estructura, el discurso de la unidad en la accion, y el fomento del sindicalismo satelital a la UOM. En eso creo que hoy por hoy somos todos vandoristas hasta los de la CTA. El otro, quizas fue el primero que se imaginaba un peronismo sin Peron. Lo que lo animo a meterse en las aguas de una politica plagada de vicios de epoca non sanctos. Y que trajera con un Sindicalismo satelital a la UOM, pero no alineado, como eran los Paricipacionistas, un desprendimiento a la violeta, esas formas que tenia el sindicalismo de ponerse la pilcha segun la epoca, en la que estaba COria, Castillo, DOnaires, etc, que le sacaron y perfilaron a Ongania la ley de Obras SOciales, que Levignston no firmo y que si firmo Lanusse, y que fuera monumental para la consolidacion del sindicalismo de esa linea. Este atrevimiento fue traicion? fue conciencia espacio temporal?. Por lo general no suelo hacerme preguntas que no tienen respuesta. Pero te aseguro que Capaccioli, hoy no cerro la Anssal que es la huella de esa ley. Mas bien quieren poner las prepagas que habian quedado afuera y manejar politicamente todo. Como veras. La aventura politica superaba al tiempo.
HARD
El hombre no es un ser angélico, decía el INNOMBRABLE.
Coincido con tu lectura de Vandor y la estructura gremial.
Con sus defectos y virtudes, siempre ha sido la última trinchera.
Artemio, reconoce esta memoria organizativa, como uno de los elementos fundamentales, de la recuperación post Alianza.
Pero mi intención, es recuperar ese bache histórico.
Sin él es imposible explicar la “opción” de Perón el 1ª de mayo del 74.
Pepe y CIA, quisieron forzar la mano, y crearon la ilusión de ser los únicos “resistentes”.
Según ellos, del otro lado estaban los que negociaron con Ongania, el Vandorismo, la Burocracia.
Al negar la posibilidad de conocer el proceso de su formación histórica, la Resistencia peronista salta del 56 al 70.
Todo lo que se hizo desde la muerte de Valle, hasta la muerte de Aramburu, solo fue claudicación.
Ellos, la M, son los que recuperan la lucha y Perón se equivoca al rechazar la expulsión de la Burocracia.
Por lo tanto, al apañarla y protegerla de la “furia popular”, Perón también es un traidor.
¿Acaso no se rasco las pelotas, del 56 al 70?
Si no paso nada, Frondizi solo quería el Desarrollo y los milicos no lo dejaron.
El viejito bueno de Illia, nos dio el último esplendor de la Democracia.
Y las Corporaciones, milicos y gremios, lo voltearon.
Esta última es la tesis del Alfosinismo y los ex PRT/ERP.
Como ves, si bien mis argumentos son pobres, conocer esta historia es necesario para comprender la décadas del 70 y el 80.
Un abrazo y disculpa la perorata
Publicar un comentario