18 marzo 2008

LA TRASGRESION QUE NOS DEBE CHICHE

MUJERES NO ASESINAS








Me puse a escuchar detenidamente cual era el meta-mensaje de Clara Rojas en su reportaje con Chiche Gelblung. De hecho con el periodista no se podía pretender mas que se luciera mas èl que ella, pero en los pocos ratos que pudiera hablar la persona que fuera rehén de las FARC, se buscaba escudriñar entre líneas cual era el discurso político de una persona que ha sido secuestrada por años, que ha sido sometida a vejámenes, separada de un hijo, sometida a una cesárea por un idóneo, que supo que le fracturaron un brazo a la criatura al nacer y que nunca la vio mas, y solo se sostuvo por su fe. Mentira armada o lavado de cerebro del enemigo (el secuestrador), en ningún momento escuche nada altisonante.

- ¿Estuvo encadenada?
- dos veces, cuanto intentamos escapar nos encadenaron.
(La deducción es que si no intentaban escapar podía estar libres de toda atadura)


-Recibíamos una Naranja por año.
-¿Nada más que una naranja por año, y algunos caramelos?
- sí, luego se repartían igualitariamente a todos, después cada uno lo canjeaba, si quería.
(No explicaba porque lo canjeaba, pero hasta parece que el vejamen es democrático)

Cuando iba a hacer un ayuno consagrado a la virgen yo simplemente les avisaba haría el ayuno de nueve días por la virgen, ellos respetaban mi decisión.
(Que amables).

-¿Dicen que las guerrilleras son mas inmisericordes que los hombres?
-Mire, mi experiencia en el parto fue diferente, a mi me trataron con mucha contención un grupo.

El control sobre la ira, la falta de rencor, el sentido de ya haber perdonado, el detalle que detecto Chiche de que aun y a pesar del cautiverio sus manos no se habían deteriorado y su explicación de que sus manos desde pequeña habían siempre sido su prioridad y que durante su secuestro las cuido de manera primordial, hasta me pareció muy femenino.

Paradojal, Clara Rojas, persona que no sabemos porque los terroristas de las FARC eligieron para integrar el primer cambio humanitario, con un discurso atenuado, no pude saber si era un rehén liberado o un síndrome de Estocolmo.


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