El presidente brasileño le advirtió hoy a su par boliviano que no "obstaculice" las relaciones bilaterales. La puja entre ambos gobiernos es por la intención del país andino de pasar a manos del Estado dos refinerías que opera Petrobrás. Brasil exige "un precio justo" y Bolivia quiere adquirirlas a valor patrimonial.
El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, advirtió hoy a su par boliviano Evo Morales, que no "obstaculice" las relaciones bilaterales, que volvieron a tensionarsea raíz del diferendo en torno a dos refinerías que posee la empresa brasileña Petrobras en el país andino.En una entrevista exclusiva a la revista electrónica "Terra Magazine", Lula afirmó que las diferencias por las refinerías de Petrobrás no pueden afectar a las relaciones entre los dos países, pero afirmó que, de haber una ruptura del contrato hoy vigente entre la empresa y el gobierno boliviano, "Petrobras irá a los foros internacionales para luchar por sus derechos". El decreto de Bolivia para monopolizar en la estatal YPFB la exportación de crudo y naftas, operación a cargo hasta ahora de la brasileña Pretobras, agravó el tema de las refinerías. Sin bien Morales intentó bajarle el tono a la disputa al asegurar que "respeta la propiedad y apuesta al diálogo", también sostiene que mantendrá la intención de adquirirlas a valor patrimonial. En tanto, Lula, luego de advertir que si "no se paga el precio justo buscaremos nuestros derechos", hoy le habló directamente a Evo: "Yo entiendo el discurso de Evo para el pueblo boliviano... Lo que Evo tiene que pensar, y yo lo he conversado con él, es que, al hacer el discurso para su gente él tiene que tener en cuenta que hay socios. Y que, por lo tanto, el discurso que él haga para su gente no puede obstaculizar una relación histórica entre Brasil y Bolivia", dijo. 
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