La nueva política tiene como irritativo, la sola asignatura de dividir a la sociedad en buenos y en malos. Por lo tanto Kichener criticó a la derecha como moralmente inaceptable. Por lo que, "contrariu sensu", la izquierda progresista, o lo que sea la nueva política, debería ser moralmente inaceptable para la derecha, por ende, enemigos. Me repetía, mientras escuchaba la Red, (radio AM) de regreso a casa del laburo, lo dicho por el presidente. Sobre todo en esa radio que esta en estos momentos en crisis por el escamoteo de la publicidad oficial para poder subsistir, y que el mes pasado había tenido que pagar los sueldos con un atraso de 20 días. Entonces, me preguntaba, ¿que es lo que me hacia mas antisistema de la nueva política? La respuesta fue rápida y concreta, esto de vivir con el suspiro en la boca y tener la moral casi kantiana de que no vaya a ser que me equivoque, que haya sido empleado publico en época de los milicos y algún buey corneta se le ocurra denunciarme, que tenga un primo cana, que no me ponga a un funcionario de culo, que no me gusten los piqueteros, que de fondo sea peronista, que de fondo no me guste Marx, que de fondo piense que Chávez en un payazo, y que D´Elia un delincuente intelectual. Que Aníbal y Alberto Fernández dos mentirosos, Gines un gordo cagón. Y que su metodología pase por esa sistemática de la confrontación lúdica de la estolidez orgánica de rebatir hegelianamente cualquier cosa, o sino matáme, como si fuera mi mujer cuando me quema el asado. De fondo, no tienen ni piedad. La política es el arte de construir poder en la articulación de nada. Consensos y creencias que van concentrando voluntades en un objetivo. Nadie ya puede imponerle a la fuerza nada a nadie. Por eso en Santa Cruz el pueblo se subleva harto de ser llevado de las narices. Harto de mentiras. Donde se ve que gente con poder como Acevedo, Sancho y otros se tiran por la borda al primer eructo del que maneja la batuta. Esto no es concertación plural. Es apriete de una. Si no queremos mezclar el agua con el aceite, que de por sí no se mezclan, se emulsionan, o vivimos emulsionados o separados, toda una elección de vida nos propone. Ninguna de las dos me gusta. Hasta aqui crei que era más fácil convivir. Para finalizar, al cambiar de radio, escuchaba la propaganda preelectoral de Filmus. Creo que si lo venden como intelectual este hombre debería reaccionar en defensa del principio básico de autodeterminación del si mismo. Todas las bondades de lo que hará se basan en lo que hizo Kichner. Realmente da lastima. Aclaro, yo no voto en Buenos Aires, Ni me interesa que gane Macri, lo que creo seria una involución, ni me interesa que gane Telerman, que me parece un corcho.
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