DE NUEVO A LAS RELACIONES CARNALES

Preparando el escenario para Cristina

No hay que ser un analista político de primer agua para darse cuenta que a los gobiernos de derecha en Argentina le correspondieron gobiernos Demócratas en Estados Unidos y viceversa que a los de Izquierda o Centro Izquierda le correspondieron Republicanos. No venimos aquí a hacer cronología exacta, pero mientras toda América latina era asolada por dictaduras militares Jimy Carter era el Presidente de USA y Cuando las Relaciones Carnales Bill Clinton. Se me podrá decir que todo empezó con Menem y George Bush padre en la guerra del Golfo, es cierto, pero la salida de la política recesiva de Clinton nos encontró como aliados junto a otros presidentes del sur de América. También el ocaso de la dictadura militar de Galtieri es la confrontación con el gobierno Republicano de Ronald Regan y su interlocutor en la guerra de Malvinas Douglas High y la situación de la hiper en nuestro país es coincidente con el escenario con la recesión del Imperio en manos de Bush padre. Nadie duda ahora que el desacierto y el ocaso de George Bush hijo, bajo cuyo mandato se viera el gobierno de centro izquierda de Kichner, tambaleante centro izquierda hacia la izquierda, haya llegado a su fin con el ciclo del gobierno Republicano que el representa. Y que el nuevo escenario sea bajo el triunfo de Sarkosy, el del PP y la derrota de Prodi en las municipales (victoria de Berlusconi) y la posible llegada de Hillary Clinton a la Casablanca, un nuevo escenario mundial, donde todo cambia, en fin, para que nada cambie. Porque seguimos siendo el teatro de operaciones defensivo en el continente de la gran nación del norte, y nos guste o no nos guste, piensen en otros términos de nosotros y no como nos gustaría como lo hicieran, piensan. El mundo Occidental y no cristiano avanza profundamente a una derechización restituida en base a la redefinición de los estados nacionales que se creían abolidos desde la creación de las organizaciones supranacionales de la posguerra mundial. La nueva globalización implica redefinir el Estado Nación y su rol en la política mundial. Nuevos valores en danza. La izquierda democrática de Europa se quedo sin respuesta concreta a los problemas que hoy bien definen algunos políticos que asumen el discurso en boga: “la gestión”. La gestión para ser posible asume la existencia de algún valor y un “pacto moral”, que esta en la base de la idea del Estado Nación, como fuerza de Impulso. A Kichner lo supero la historia y su propio discurso político.