LA DIPUTADA QUE LLAMO HUGO CANTERO, ¿QUIEN ES?

LA UNIDAD DE ACCION POR LA UNIDAD DE CONCEPCION.

CRISTINA ALVAREZ RODRIGUEZ, DIPUTADA DE LA NACION (FRENTE PARA LA VICTORIA), SOBRINA NIETA DE EVITA.









DEL CLARIN DEL DOMINGO 07.05.2006




El País





HOY SE CUMPLEN 87 AÑOS DEL NACIMIENTO DE EVA DUARTE


Por deseo de la familia, los restos de Evita no estarán con los de Perón


Como querían sus hermanas, seguirán en la Recoleta y no los llevarán a San Vicente.







Lucio Fernández Moores
lfmoores@clarin.com

Ella dice que el mejor homenaje que se le puede hacer a su tía abuela es con trabajo. Por eso está detrás de cada una de las actividades que se programaron para estos días. Es que hoy se cumplen 87 años del nacimiento de Eva Duarte de Perón. Y ella, su sobrina nieta Cristina Alvarez Rodríguez, cuenta que será imposible ver descansar juntos en el futuro Mausoleo de San Vicente los restos de "la abanderada de los humildes" y los del general que la hizo su esposa.

"El deseo de mi abuela Blanca, ya fallecida, y su hermana Erminda era que los restos de Eva descansen en paz en la bóveda familiar de la Recoleta. Y nosotros respetamos eso", cuenta Alvarez Rodríguez sobre la decisión de las hermanas de Evita. La historia del cadáver de Evita —"profanado y ultrajado", recuerda— es una razón más que suficiente para dejar las cosas como están.

En la quinta de San Vicente, donde Perón y Evita solían descansar los fines de semana, hoy funciona el Museo Histórico Quinta 17 de Octubre. Allí se avanza en la construcción del Mausoleo que albergará a los restos de Perón. Pero Evita tiene su propio museo, en el porteño barrio de Palermo.

"Vine a la Argentina por una semana y media y quise pasar por aquí. Evita es alguien muy conocida fuera de Argentina", dijo Melisa a Clarín el viernes, a la salida del museo de la calle Lafinur, en un perfecto español. Ella es estadounidense y tiene 26 años. Es una más de las decenas de turistas que pasan diariamente por el lugar, a sólo una cuadra del Botánico.

El libro de visitas del museo es un fiel reflejo del interés que despierta la figura de la ex primera dama en el extranjero. Turistas de Estados Unidos, Alemania, Ecuador, Australia y, sobre todo, Brasil, entre otros países, dejaron allí sus impresiones. "Que el espíritu de Eva se esparza por los corazones de todos los políticos", escribió-rogó Paulo, de Brasilia, en perfecto portugués.

Vestidos, zapatos, fotos, pequeños objetos y extractos de sus discursos y su libro ("La razón de mi vida") son exhibidos con sencillez y prolijidad. El museo se recorre a lo largo de varios salones en los que se va narrando la historia de Evita. También hay videos, bustos y cuadros.

El objeto más enternecedor es, sin duda, el trencito que Evita le regaló a un niño enfermo en un hospital que visitó cuando era primera dama. Ese niño, llamado Saúl Maciyzyn, se acercó al museo para aportar el regalo que había recibido medio siglo atrás. Maciyzyn conoció a Evita tras un accidente por el que debieron amputarle un brazo. Hoy dirige una ONG dedicada a chicos discapacitados.

La sobrina-nieta de Evita, diputada nacional y furiosa kirchnerista, recuerda otra anécdota: "Un hombre de más de 70 años trajo un día uno de los cirios que rodeaban el cuerpo de Evita durante su velatorio. Era uno de los conscriptos que hicieron guardia en aquellos días".

También es hoy museo la casa paterna de Evita, en la localidad de Los Toldos. Allí nació un 7 de mayo de 1919. Y esta semana empezaron los actos y homenajes con varias actividades comunitarias. Casi todos sencillos. El jueves hubo uno en Luján, con la vicegobernadora bonaerense, Graciela Giannettassio. Ayer hubo otro en San Martín. Mañana, uno en Almagro. Y el martes se hace el lanzamiento nacional del Movimiento Evita en el Luna Park.

"A mí me parece que los homenajes no se hacen con palabras ni con los bronces sino cumpliendo con el legado", le dijo a este diario la sobrina-nieta de Evita. Para ella, su histórica pariente "es el símbolo de lucha y de los derechos sociales en la memoria social".