El diputado Chaquires también fue escrachado en la confiteríaTras un escrache al Gobernador, autoconvocados del PJ provocan una batalla campal en San José
La movilización y el cacerolazo terminó con varios heridos cuando una patota que se autodenominó “autoconvocados del PJ”, irrumpieron en la movilización que era pacífica y comenzaron a dar golpes a diestra y siniestra sin diferenciar mujeres de hombre y adultos.
Un grupo de manifestantes, tras el cacerolazo en la plaza 25 de Mayo, marchó hacia la residencia oficial para manifestar su rechazo a la política de apoyo al Gobierno nacional del gobernador Jorge Capitanich. Poblaron la esquina de Pellegrini y Saavedra y comenzó a escarchar al diputado Juan Chaquires que se encontraba en la confitería San José. El legislador comenzó a hablar por teléfono y después lo sacaron por una puerta de atrás y casi inmediatamente cayó al lugar una patota de 15 muchachones que rompió una mesa y comenzó a repartir golpes a todos los que se manifestaban en el lugar, sin distinguir entre mujeres y hombres. Provocaron una batalla campal con trompadas y patadas sin que interviniera la Policía que miraba con calma a pocos metros de lo que ocurría.
Los manifestantes comenzaron a defenderse como pudieron; los que tenían posibilidad salían corriendo en cualquier dirección, otros levantaban piedras y trataban de frenar con ellas a los incendiados atacantes.
Como se advierte más arriba no hacían diferencias entre jóvenes o adultos o mujeres y hombres. Todos ligaban. Una señora mayor intentaba exponer sus razones mientras recibía de uno de sus costados un impresionante cachetazo ante la atónita mirada de los presentes.
Autoconvocados del PJSegún dijeron en el lugar, los agresores eran “autoconvocados del PJ”, que estaban reunidos en el partido Justicialista y que los llamaron y llegaron “para defender a nuestro gobernador Jorge Capitanich”, dijeron.
DenunciasAl cierre de esta edición varios de damnificados efectuaban las denuncias correspondientes por haber sido agredidos.
La movilización y el cacerolazo terminó con varios heridos cuando una patota que se autodenominó “autoconvocados del PJ”, irrumpieron en la movilización que era pacífica y comenzaron a dar golpes a diestra y siniestra sin diferenciar mujeres de hombre y adultos.
Un grupo de manifestantes, tras el cacerolazo en la plaza 25 de Mayo, marchó hacia la residencia oficial para manifestar su rechazo a la política de apoyo al Gobierno nacional del gobernador Jorge Capitanich. Poblaron la esquina de Pellegrini y Saavedra y comenzó a escarchar al diputado Juan Chaquires que se encontraba en la confitería San José. El legislador comenzó a hablar por teléfono y después lo sacaron por una puerta de atrás y casi inmediatamente cayó al lugar una patota de 15 muchachones que rompió una mesa y comenzó a repartir golpes a todos los que se manifestaban en el lugar, sin distinguir entre mujeres y hombres. Provocaron una batalla campal con trompadas y patadas sin que interviniera la Policía que miraba con calma a pocos metros de lo que ocurría.
Los manifestantes comenzaron a defenderse como pudieron; los que tenían posibilidad salían corriendo en cualquier dirección, otros levantaban piedras y trataban de frenar con ellas a los incendiados atacantes.
Como se advierte más arriba no hacían diferencias entre jóvenes o adultos o mujeres y hombres. Todos ligaban. Una señora mayor intentaba exponer sus razones mientras recibía de uno de sus costados un impresionante cachetazo ante la atónita mirada de los presentes.
Autoconvocados del PJSegún dijeron en el lugar, los agresores eran “autoconvocados del PJ”, que estaban reunidos en el partido Justicialista y que los llamaron y llegaron “para defender a nuestro gobernador Jorge Capitanich”, dijeron.
DenunciasAl cierre de esta edición varios de damnificados efectuaban las denuncias correspondientes por haber sido agredidos.
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