REMEDIOS QUE MATAN

ASPIRINAS PARA LOS MUERTOS

El marido de Diana Conti, Ginés González García, Zanola, Moyano, Hendler, tal cual se va develando el misterio con la lentitud del crecimiento de la orquídea que maneja Oyarbide, uno debe suponer que en todo proceso de corrupción en las Obras Sociales Sindicales, debe haber una cabalística mesa de tres patas. El estado, los privados, y los trabajadores que las administran. Capaciolli, Capaciolli debe ser al menos una palabra sagrada y solo para invocar los sagrados influjos del dinero. Pueden ir haciéndolo lento o rápido, pueden imprimirle un timming franco o retardatario. Pero cada día es más claro que tanto al APE y a la SUPERINTENDENCIA DE SALUD la tenían jaqueada entre el estado, los particulares y una cierta dirigencia sindical corrupta. Lo interesante, es que en el APE se repartían el dinero en un círculo áulico. No cualquiera accedía a la gran gama de aportes que debía hacer el estado para las prestaciones de los enfermos de TODAS LAS OBRAS SOCIALES SINDICALES. Como en algunos casos, los reintegros se repiten sistemáticamente, inclusive con troqueles falsos. El marido de Diana Conti va a indagatoria. En realidad no se cual es en la actualidad el vinculo con la diputada, quizás está separada, o más unida que nunca con el imputado. No me corresponde a mí saberlo. Lo que si me interesa y a forma de dato general como se toca con todo. Diana quizás gozo las mieles de haber usado el dinero de la corrupción por bien conyugal, aunque se bañe en el Jordán del kirchnerismo. La Justicia lo dictaminara.