02 diciembre 2010

SOLO SE TRATA DE VIVIR, ESA ES LA HISTORIA

LA DIVERSIDAD QUE NO SALVA, NI LA BIOETICA QUE NO REDIME.

Pedro Federico Hooft permitió a Tania Luna obtener su documento femenino aun siendo varón. Solo porque tenía apariencia femenina. Era el primer travesti que conseguía ese logro. El abogado que en el 2008 intentaba a toda costa olvidar que en el año 1975 había asumido en el juzgado Criminal y Correccional de Mar del Plata y que con posterioridad y durante la Dictadura Militar fue juez. Así fue que vieron los Organismos de Derechos Humanos como Pedro Federico actuaba funcional al Proceso de Reorganización Nacional. Intervino además en diversas causas iniciadas por la Noche de las Corbatas de la ciudad Balnearia.
No solo eso, en los juicios de la Verdad realizados allá, Don Pedro fue visto por detenidos a, quien le pidieron ayuda, y se hizo el sota, tal como conto la mujer del Dr. Candeloro. Pero ebrio de sobrevivir en dictaduras militares y democracias creyó que con el apoyo a la diversidad de sexo podría conseguir la simpatía de los organismos de los derechos humanos que apenas meses después le organizaron un hermoso Jury por crímenes de lesa humanidad. Sus trabajos sobre Bioética, sus trayectoria en la universidad que lo hacen renunciar hacia el 2006 se ven opacados en la sentencia que manda a la cárcel a Diego Martínez
ya que el Tribunal Oral Federal 1 de Mar del Plata condenó a la pena de prisión perpetua en cárcel común a Gregorio Rafael Molina, suboficial de la Fuerza Aérea y ex jefe del centro clandestino La Cueva, que funcionó en el viejo radar de la Base Aérea, en la sentencia el juez es partícipe necesario en los crímenes de lesa humanidad. Como sigue la historia, más allá de Jury de Enjuiciamiento no se sabe. No hay Jordán, ni olvido en la reivindicación de la diversidad de sexo, si cree que con ese maquillaje se podía salvar, estaba mal de la cabeza. Hoy Tania tendrá su documento, Don Pedro tiene su espada de Damocles.



No hay comentarios: