LAS NUEVAS MONTONERAS

EL ASESINATO DEL MAYOR IGARZABAL

La prohibición del uso de armas a la policía federal más allá de la paranoia conspirativa contra el gobierno de la Sra. tiene otras connotaciones políticas significativas.  Un podría pensar que no pretenden que le tiren un muerto o varios muertos a fin de año.  Otras, es tirarle al gobierno de la Ciudad Autónoma la responsabilidad de la inacción en la construcción de viviendas y ver a los sin casa (sin tierra) como verdaderos montoneros de siglo XXI que están luchando contra el centralismo pituco en defensa del interior profundo y pobre. Las nuevas montoneras que se levantan contra el gobierno unitario de Macri. El Pitu Salvatierra es como un Chacho Peñaloza contra Sarmiento. Donde plantean una independencia de decisiones de la nación fuera de la nación como lo son la usurpación de tierras contra las leyes de del Estado. Y además como si Sarmiento no le mandara a Peñaloza el Mayor Igarzabal, sino a Pachano a arreglar el entuerto de los entreveros. La Nación y así lo aprendimos desde chicos tiene el monopolio de la fuerza, porque cuando resignamos un derecho, como el ceder las tierras resignamos también recursos de los otros y derechos de los otros. Esto parece que Vertbisky le canta un huevo, que el resto de los argentinos pobres o ricos deben pagar por encima de lo que la ley decida. Todo por una visión distorsionada de la realidad, donde la opción es represion de tolerancia cero o garantismo. Tal cual pasaba en vida de Kirchner las opciones siguen siendo fundamentalistas y estúpidas. Todos sabemos y hasta el mismo Vertbisky sabe, que además de una policía que padece niveles importantes de corrupción en todas las provincias, igual que las fuerzas de seguridad, también entre los reclamantes de tierra, hay escondidos otros factores que fomentan ese estado de cosas, desde pool de alquileres a los pobres y narcotráfico. El dato aportado por los curas villeros no es menos importantes que todas las denuncias que ha hecho Vertbisky sobre otros temas, salvo que la sospecha de curas pedófilos y la creencia en dios que hay sobre una parte de los sacerdotes de la iglesia desacredite los dichos del Padre Pepe y otros integrantes del movimiento y de la Pastoral Social. La intransigencia y la negativa a acatar la ley, no convierten a la gente que toma el predio de Ferrocarriles concedido a un club en un hecho aislado. Constituye un acto de incapacidad para la población civil. Porque es imposible llamar a la ciudadanía a negarse a pagar impuestos de la misma manera de que ellos se niegan a abandonar las tierras. Ellos no tienen nada para embargar, a los otros se los ejecutará y embargara. Es obvio que no somos todos iguales ante  la ley. Hay algunos que ante la ley hacen lo que quieren otros no pueden. Si no cumple, son castigados. Estos son protegidos, los otros desposeídos. Y la desposesión es para sostener planes de asistencia a esa gente que está en la manera de la amenaza constante de usurpación y corte pidiendo planes y lo que sea. Esta irracionalidad es la que un ESTUPIDO IMBERBE nos mete. Esto es posible solo por los arrebatos de ira descontrolada de la presidenta que hoy la consuela fulano mañana mengano. Haciendo nada  y tratando de aliviar la coyuntura personal, sobre la sospecha que ha tomado una medida en el marco de una teoría conspirativa, cuando los que conspiran para que todo marche bien son ellos mismos. Podemos ver los centenares de compras que son promocionadas en los diarios impresos y en los folletines que son dejados en las casa. Solo fíjense en las cuotas cuando salen de los bancos que trabajan las empresas, y las tasan que cobran. Los maravillosos descuentos fíjense cuanto se van cuando se aplica el pago con tarjeta. En una economía inflacionaria el hipergasto de los recursos no ahorrables y donde el dólar no es refugio y el ladrillo inalcanzable, la renovación de los electrodomésticos y el gasto superfluo de la clase media tira cualquier índice para arriba. ¿Porque saco entonces una canasta navideña de 25 pesos, si nos va de puta madre?  Cuando uno mira las ofertas de los supermercados con 25 pesos no compra una botella de vino más o menos razonable en gusto, y no es la que tomara, los que beben Catena Zapata, es la que intentara tomar un tipo clase media que toma un Callia u algún otro. No hablemos pavadas, que hablamos de vinos menores a 8 dólares. Deliran y deliran. El consumo no alcanza para distribuir la riqueza ni tampoco, alcanza para beneficiar a los sectores mas necesitados.