Cuando le tocó hablar a Horacio García, presidente de la Fundación El Libro, un puñado de jóvenes integrantes de Bachilleratos Populares de Jóvenes y Adultos (entre otros, IMPA, Maderera Córdoba, el de la Villa 21/24 y MTR), creados por las empresas recuperadas, organizaciones territoriales del conurbano bonaerense y Capital Federal, junto con cooperativas de docentes e investigadores, desplegaron unos carteles con sus reclamos: reconocimiento y financiamiento de los Bachilleratos Populares. Mientras cantaban y repetían la consigna “escuelas populares”, García intentaba, levantando el tono de voz, que lo escucharan. “El libro es un puente, un vehículo para el intercambio de ideas, un soporte para la tolerancia y la integración.” Quizá por el ruido que hacían las agrupaciones, cantando cada vez más fuerte, quedó diluido el “tibio” reclamo del sector editorial por el aumento del precio del papel. “El sector ha hecho un gran esfuerzo, manteniendo el precio de los libros que han subido menos que el nivel de los precios minoristas”, señaló. “Esta feria es una apuesta muy fuerte a la permanencia del libro en papel. No es una decisión dictada por la nostalgia. El sector asume e incorpora las innovaciones; en poco más de treinta años hemos pasado de tecnologías del siglo XIX a tecnologías del siglo XXI”, añadió García.
FUENTE: PAGINA12
No hay comentarios:
Publicar un comentario