EL OTRO RELATO

ADIOS A VIRGINIA OGANDO

El otro relato, es que Virginia Ogando no pudo soportar más la farsa de las organizaciones de Derechos Humanos que representan al gobierno. Mujer que desde niña y con su abuela había conseguido, providencialmente salvarse de los verdugos militares, no pudo salvarse del imbricado lazo de los organismos defensores de los derechos humanos. Así fue como opto por la vía más simple: DESAPARECER POR ELLA MISMA. Antes que desaparecer en manos de los desaparecedores de historias verdaderas, y los inventores de desaparecidos que no fueron. Ella tenía historias reales de desaparecidos. Compañeros de sus padres, personas que imaginaron   un mundo de libertades sociales e igualdades. No un mundo de un relato y del cobro de jugosas indemnizaciones a manos del pueblo que sienten defender.

Virginia Ogando, hija de desaparecidos, eligió su propia voluntad para desaparecer de la faz de la tierra.    Y contrariamente a lo que dijo el ministro de Derechos Humanos, el verdadero verdugo, los militares,  están siendo juzgados y encarcelados, son los que funcionando la justicia, no dejan en paz ni a los vivos, ni a los muertos.

Virginia no buscaba a culpables de sus males, solo buscaba a los responsables de la desaparición de su hermano, pero se hastió de “los buenos” y un día cualquiera, como tantos, dejo su cuerpo inerte para conseguir estar en paz con ella misma.

(O TAL VEZ SUPO DE UNA ENFERMEDAD TERMINAL Y NO LO COMENTO CON NADIE).