Las elecciones de La Ciudad Autónoma ya fueron, ahora lo mas interesante esta por venir, lejos esta el escenario de ser complicado. Todos creíamos que el marco era la tarea política de Kichner en el plano nacional a partir de los resultados de la elección en Buenos Aires. Al punto que se llega a nacionalizar la misma. Pero el mundo no se detiene en el ombligo de Kichner. Una ola de cambio recorrió el país desde el mismo momento que el Presidente le indica a Filmus que firme con Yasky el básico para los maestros. Y no me refiero solo a la muerte de Fuentealba, sino también a las cosas que han pasado en su tierra de origen Santa Cruz. El escenario Latinoamericano, y Europeo, que son los que mas cercanamente nos involucran y los que en plano mundial nos halla insertos siguen una dinàmica que la diplomacia de Kichner no entendio jamas ya no esta mas Tony Blair, Chirac se fue, Rodríguez Zapatero le resulta esquiva la política luego del 11M tan fatídico y vital para su llegada al poder. Prodi es jaqueado por las discrepancias de su propio partido en formación mientras el corrupto Berlusconi escala nuevamente posiciones. Sarkozy gana en Francia frente a una Segolene Royal sin apoyo del vetusto socialismo francés. Lula abre a Brasil hacia nuevos horizontes, mientras Bush prepara maletas, Kichner sigue pensando si pingüino o pingüina, estropeando como elefante en un bazar lo poco que queda de un país como reserva estratégica de crecimiento, la credibilidad. Enfáticamente su proyecto con Cristina o sin ella es errático, seria perverso dejarle a él la tarea de administrar la debacle, para solucionar un problema lo tapa con mas problemas. No es la soja, las vacas, la inflación, la elección de Buenos Aires, las reservas del Banco Central, los fondos de las AFJP, el PAMI, nada. Es ver si se puede encontrar una alternativa diferente a un proceso que nos va, poco a poco, cercenando todas las libertades, no por un acto deliberado, sino por agobio.
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