EL DIA DE LA MADRE

NO ES EL DIA DEL ARQUERO

Ayer y escuchando a una admiradora de la revolución K, que comparaba la juventud K con la generación nuestra como una generación que ve de la manera de Einstein concibió la física cuántica, que pueden ver lo que a nosotros desde el mundo estructurado no podemos ver, por eso no somos permeables a los cambios. Que en el inconsciente colectivo (vemos la mezcla de psico política) Cristina empezaba a funcionar como LA MADRE. Lo cual, dije no es nada incompatible con ese segundo complejo que había creído encontrar Jung de la Virgen, que constituía la Imago Mundis de los hombres.

Como mi mente es absolutamente constructiva por ende como diría el escolástico en la inteligencia aplicaría el “delenda est….” No pude evitar recordar a Néstor indicando a Hebe como MADRE de todos los argentinos.

Luego, asocie los hechos que no dan por tierra con la imagen de luchadora pero embarran la imagen de Hebe, como para hacer una imagen de madre descastada, y todo durante el proceso electoral y mas luego de haber optado por hijos parricidas y de despilfarrar por sostener a ellos con fondos públicos.

Luego Cristina, con fraude o sin fraude, ha obtenido (ya casi nadie duda que fue así en el imaginario colectivo) una victoria aplastante.

Volvemos a la conversación con esta mujer admiradora de la revolución K que se está llevando a cabo y que nosotros, los viejos, los que hablamos del pasado estructurado no podemos ver, nuestro incociente colectivo, (los números de los votantes lo demuestran) y en votos al revés, hemos parido una madre protectora, Cristina.

Viuda ejemplar, madre abnegada, y luchadora cabal. Inteligencia superior, discurso ameno pero sutil y fiero cuando se necesita. Nuestra nueva Madre supera el estigma de Néstor y lo reemplaza, por algo más duradero. Tiene capacidad de gestionar, no es solo un símbolo.

Y además marca las diferencias con el marido muerto.

Tenía razón en este juego de lo cuántico aplicado a la política, esto no lo había visto y estaba ante mis ojos, acostumbrado a ver lo palpable.