Cuando Kirchner dice que no le van a perdonar haber querido distribuir la riqueza, suena tan pedante, que habría que ser un poco más prudente. El no quiso distribuir la riqueza entre alguno de sus amigos. No con todo el pueblo. Al menos la distribución no fue transparente. Es inútil aquí dar explicaciones de cómo se incorporaron los 1.400.000 nuevos pasivos al sistema. No con fondos genuinos, sino aplastando la pirámide. La creación del nuevo empleo no se cuido en base a las retenciones que fuera empleo formal. Se tomo para la estadística la ocupación, no el empleo. Por lo que a los efectos de la situación actual se mide el empleo y no la ocupación que es caótica. Lo distribución del ingreso con la falsificación del INDEC es terrible. Los aumentos no remunerativos. Los contratados por el estado nacional, provincial y municipal, verdadera aberración de la ley de contrato de trabajo que debería respetar todo estado de derecho, hablan a las claras del delirio distributivo que se impuso Kirchner. No le perdonamos que no lo haya hecho. Si viene al caso, aquellos que profesamos la militancia peronista. Por más que tenga la claque que tantos intelectuales que le surtan libreto, el pensamiento político de un peronista es tan simple y sencillo, que frustrado el intento, no sirve. Néstor lo que no hiciste, no sirve para un carajo, lo que intentaste hacer, tampoco. Y lo que hiciste fue todo al revés de lo que ahora decís que es por lo que te castigan. Una verdadera mentira.
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