THE GREAT PRETENDER
Cuando la Jueza Romilda Servini de Cubria inicia 1300 causas a funcionarios de mesas electorales por incumplimiento de cargas públicas, debería hacerse un cambio de caratula. El ser titular de mesa es dar fe un una gran estafa política a la sociedad. Grandes movilizaciones de personas y de asentamientos urbanos, o movimientos de personas hacia asentamientos nuevos para garantizar presencia y victorias electorales. Eso solo lo logra el dinero. La gente, que es legalmente sensata, pero no políticamente estúpida, prefiere no perder tiempo en lo que no maneja. Si lo que va a ser, será es obvio que no tienen que pedirle que se pierda el día como carga pública para que ello acontezca. De repente, la Dra. Poder, inicia un juego para los que vendrán no se escapen y convaliden con su firma la escenografía de un gobierno popular. De una democracia que se sostiene en un discurso que no le cree nadie. Pero hay que pensar para el futuro, no vaya a ser que lo mismo le pase a la puta oligarquía.
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