ROL DE LOS GREMIOS CHICOS EN LA RELECCION DE MOYANO

CONTANDO LOS POROTOS

El 12 de julio es el día de la relección de Moyano, y será buena hora de negociar, Moyano, si quiere ser relecto con aquellos gremios pequeños que ha destrozado por su acción gremial en la era de Néstor. La suma de SMATA, UPCN, EMPLEADOS DE COMERCIO, UOM, LUZ Y FUERZA, OBRAS SANITARIAS, UOCRA, SANIDAD en cantidad de delegados congresales, mas algún que otro gremio importante que se me haya olvidado, parece ser que le daría la victoria a Caló o al otro, (¿Porque no Pignanelli de SMATA). Pero el pronóstico es puntear uno a uno los congresales. Ya que esta todo mas para un ancar que para una victoria pletórica. O mejor una formula de consenso. Pero de nuevo Caló quedaría relegado ya que mando a Luna a ser secretario de la CGT porque él no llegaba al cargo más alto. Esta claro que la posición para una reactivación en la memoria peronista esta dada por los gremios de industria. Como fueron siempre UOM, TEXTILES y UOCRA. Siempre de ellos tres salieron los secretarios generales en las épocas donde esto era valorizado por sobre todas las cosas. Hoy no, hoy los gremios de servicios tienen un rol protagónico y mas en una economía que esta casi en el monocultivo de un modelo agroexportador. Muchos gremios chicos tienen facturas para pasarle a Moyano, pero esta claro que los gordos, tampoco se preocupan por los gremios chicos, estos gremios serán los que definirán a la hora del voto secreto de los delegados congresales quien será el Secretario General de la CGT. EL filtro será el estar al día con las cuotas sociales, pero no es nada que no se pueda arreglar o que se establezca una amplia y generosa moratoria para dar por pagadas las cuotas sociales y estar en condiciones de votar. Barrionuevo, aunque lo combatió, le tiene más precaución a los gordos que a Moyano. Seguro que terminara apoyando a Moyano como también lo hará el Momo Benegas. Lo del parate de los reintegros de subsidios del APE que hacen peligrar a muchas obras sociales por el costo de los medicamentos, no es un dato falso de Moyano, y las organizaciones gremiales chicas que tienen obra social, que este organismo funcione bien es lo que les permite cubrir otras prestaciones medico asistenciales que deben cubrir el PMO y los recursos de amparo. Si el gobierno por ahogar a Moyano sigue con el desmantelamiento sistemático del APE también tendrá el voto negativo de los gremios chicos. Aquí no se habla del fondo de redistribución que tanto gordos como moyanistas se han repartido por encima de estas organizaciones, como así también el pozo denominado “bidu” que son los fondos sin identificar que están en poder del estado y que no se distribuye desde hace tiempo. Que con solo aplicar una tasa por beneficiario podría ser fácil de prorratear ya que los padrones de la Seguridad Social que hay en la superintendencia de salud, estan mas o menos al día, porque de otra manera seria imposible que se transfieran fondos a todas las obras sociales. Las dificultades además que enfrentan estos gremios y que Moyano la tiene clara, es que el 18% como pauta depende de la base salarial de cada convenio colectivo. Es decir no es lo mismo para un convenio que arranca en 2000 pesos un 18% que otro que arranca de 3500 y así para arriba en la escala salarial. Lo que no corre en este discurso es el trabajador informal y el jubilado, deuda histórica de la CGT que tiene que reivindicar como propios, pero no así las asignaciones familiares que de aumentar los convenios por sobre el estándar dejarían de ser percibidas por algunos trabajadores incluidos en convenios colectivos de trabajo. Además, si no se quita o sube la base imponible de ganancias casi todos los trabajadores convencionales estarán en la situación de tributar, con lo que la distorsión que genera el 18% por el tema salario familiar también agudizaría por que a un 18% por ciento habría que quitare la parte del trabajadores que entre en impuesto a las ganancias. Los gordos no pueden hacerse los sotas con este tema. No podrán firmar acuerdos por el 18% sin el retoque de los temas asignaciones familiares e impuesto a las ganancias. De no hacerlo seria verdaderamente un descredito que terminaría finalmente con la devaluada imagen política de la CGT por parte de los trabajadores en relación de dependencia o sea el trabajo formal. La pelea ser áspera, y no solo en el campo de voto congresal por congresal, sino que de perder Moyano y los gordos pasar por alto los temas que apuntan las organizaciones y que Moyano que no tenia prisa, ahora apura, será realmente contundente a la hora de vaciar de contenido la CGT. Ya no pasa a ser un mero problema de caja, sino de subsistencia política y gremial, como así también de la continuidad de las obras sociales sindicales. Un tema que puede ser pasado por alto por muchos dirigentes gremiales que miren para otro lado, no así para los trabajadores cuyo destino será incierto. Nadie va a votar a Moyano porque le agrade, sino simplemente, porque es será la única cara visible para darle cara a un gobierno que de nacional y popular tiene nada más que el discurso. Moyano no lo quiere nadie, puede ser, pero a la hora de poner los porotos sobre la mesa para contar los tantos el que no los tenga, pierde.