EL PROGRESISMO CONSERVADOR

NO SER PERMEABLE AL CAMBIO

Es interesante la movida que se genera a partir del cambio de aspecto de las páginas de Facebook. Por alguna razón millones de personas ingresaron a la red social que innovaba y revolucionaba la conformación de la vida cotidiana de ellos mismos. Lejos de la crítica a la privacidad de las personas y cualquier otro estropicio cometido por la gente, es interesante observar la persistencia a la oposición de quien detenta el poder administrador. Es manifiesto la cantidad de cosas que aparecen en nuestro muro para la junta de firmas para que no se cambie el look de las páginas del perfil de Facebook. En la rebelión que seria un signo de progresismo ante el poder, esta también la definición de un nuevo conservadorismo. El de mantener las viejas formas de Facebook, que revoluciono el modo de vincularnos por medio de rede sociales. Lo más llamativo que en la rebelión, esta para mantener la falta de desarrollo de la página. Es decir, al incorporar novedades funcionales con la tecnología me niego a seguir desarrollándolas. Este comportamiento bipolar va por las redes sociales sin que aun meditemos sobre su filosofía. Creo que como en castellano esta dominado por las corrientes de usuarios españoles es bastante parecido al contenido del movimiento de los indignados. Me rebelo contra el sistema democrática y contra toda opresión sin poder definir mi acción política, ya que en la acción política esta la naturaleza del cambio. De fondo, la actitud es exculpatoria. El comentario sobre este episodio que acontece en la red social más importante de vínculo entre usuarios es un fiel reflejo de un estado de cosas social. El progresismo que se vuelve conservador. No toda rebelión contra un sistema es en beneficio de un cambio positivo. A veces es conservar casualmente un estado de cosa con temor a una renovación de en si misma. La idea del progreso en la historia vuelve a ser cuestionada. Oh Facebook, oh Humanidad……!!!