Hoy vemos en el diario el día de La Plata que en una firma Penisse se ha descubierto trabajo esclavo. El que repudiamos sin ningún atenuante. Pero estas prácticas no son solamente resultado de una visión negrera de una patronal insensible, son también y esta a la vista de la existencia de un mercado ultra competitivo en un sector de mercadería perecedera que se rige por oferta y demanda, bombardeado por propaganda oficial desde los precios del Mercado Central de la Matanza, que tiende a formar los precios comparativos del resto de la faja del cono urbano. Está claro que tener a los trabajadores en blanco, significa que alguien se tiene que hacer cargo de los costos que eso significa. Hacerse cargo de los costos que eso significa es ponerlo en el precio final de la mercadería que vendo. Ponerlo en el precio final de la mercadería que vendo no puede carecer de un piso en la ley de oferta y demanda de un mercado. Un productor no puede vender a pérdida un producto, sobre todo un producto tal cual ya dije de carácter perecedero. Estos productos, por su volumen y su naturaleza no son comodities. No justifico el trabajo en negro, pero la existencia en algún momento del Mercado Central de la Matanza como organismo concentrador y formador de precio era casualmente para este fin, en su origen cuando se hizo el Congreso de Rosario mucho antes de que fuera formalmente inaugurado por Alfonsín siendo presidente. Hoy habría que preguntarse cuál es la cadena que siguen los productos que vende Moreno en el Central y si hay trabajo esclavo o mercadería sobrante, a punto de vencerse o subsidiada para que los precios sean tan competitivos en relación a los productos regionales.
Un comentario aparte: Un inspector relata en su relevamiento esto:
“Según se pudo verificar, en el establecimiento dedicado a la producción de tomate también se levantan precarias viviendas donde -según la investigación de Trabajo- viven los trabajadores y sus familias. Son casas de madera con "falencias en las instalaciones eléctricas, sin agua corriente y con precarios sanitarios”
Todo esto referido a un establecimiento ubicado en las cercanías de la Ruta 36 a la altura del kilómetro 47, en Colonia Urquiza -Abasto-, donde se constató la presencia de 170 trabajadores, en su gran mayoría de nacionalidad paraguaya, que desempeñaban tareas para la empresa Expovictor S.A
(Fuente diario el Día de La Plata)
Como se podrá ver si multan a la empresa por las casas de madera con falencias en las instalaciones eléctricas, sin agua corriente y precarios sanitarios, los intendentes del cono urbano gastarían su presupuestos en multas. Y eso que son de la misma provincia.
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