21 noviembre 2011

NUEVA ESPARTA

CRIMENES Y CRIMINALES


Cualquiera sea los errores de la madre, y aun siendo una permisiva, no tiene derecho nadie de tomar la vida de su hijo para solucionar diferendos.
La muerte de tomas, revelo con la más brutal crudeza de una sociedad progresista que no soporta la violencia de género y la tolera como una debilidad consentida por la mujer. El hijodeputismo que se ejerce de la política por parte del kirchnerismo no es más que la institucionalización de algunas variables más o menos desorganizadas del pensamiento argentino, edulcoradas por el discurso político.
Tomas no era culpable de nada. Este pequeño dato, se le olvida a cualquier analista y a cualquier comentarista a pie de página de la noticia donde ponen en tela de juicio la conducta de la madre...
No me corresponde a mi ejercer la defensa publica del genero siendo varón, me corresponde a mi defender la inocencia de Tomas, y recalcar que su muerte fue en vano, y que es lo que está haciendo de la Argentina la NUEVA ESPARTA, no porque condenamos al sacrificio a los más aptos, sino porque matamos a los niño, no solo por homicidio alevoso, sino por revolver basura, o por dejarlos en manos del paco o por accidentes viales.
Esta sociedad medusa que se come una generación no deja de ser parecida y en otro nivel a la de unos militares que se comieron a 30.000 jóvenes,
Esta está comiéndose el futuro en chicos en la violencia escolar, en la violencia de género y familiar, en la violencia policial en muerte a raíz de robo. Esto no es un genocidio, por supuesto, pero tendrá las consecuencias básicas de un vacío generacional, de los que no estarán. Y se van de poco a poco.
Pero volvamos a tomas, ante poner en tela de juicio la vida íntima de la mujer, espero que alguien ponga de manifiesto el derecho a la vida de Tomas y el derecho a la libertad de su madre, sin presiones y aceptando su decisiones y sometiéndose a la justicia las controversias. Sino la vida no valdrá un carajo en este país.




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