YA PINCEN MALEN SE VIENE TODA LA PAMPA ARRASANDO

MIREN QUE COSA LO ESPERAN CANTANDO

Ella tambien eligió el siete, el numero perfecto, y dijo el siete, al igual que su marido es el numero con el que crece el empleo año por año. Del 0,6 histórico estamos en el siete. La gran siete, pensé, para mí, grande señora, esto es crear empleo. Los cartoneros del Ex tren blanco se amontonaban en una plaza improvisando con plástico y basura un poco de refugio. Un fuerte olor a orina y mierda sube por el calor de Enero en Buenos Aires. Bien, pensé, ya les va a llegar a todos el crecimiento. Pues mientras algunos tienen que cartonear otros van por empleos en relación de dependencia, con Obra Social, jubilación, vacaciones, aguinaldo, horas extras, con todo. Las mujeres que pasaban a mi lado embarazadas como si leyeran mi pensamiento me miraron con ojos extraviados y una puteada en ciernes. Anda vos, pelotudo con el Plan Materno Infantil y todo gratis a parir. Mas allá de la alegría de un hijo, las colas para los pañales, las leches, los turnos, los remedios, las estudios, la perdida de los premios, las faltas sin aviso, y todas las cosas que te perdés por tener un hijo y con un laburo donde apenas llegas a los 1000 mangos de bolsillo, te podes ir bien a cagar…..!!!!! Pero la distribución del ingreso, pensé mientras me comía para adentro la puteada mental de las dos embarazadas que se iban lentamente a mis espaldas es la asignatura pendiente y que la presidenta viene a resolver. Un diablo vestido de Moyano y un ángel vestido de Barrionuevo se me presentaron en mis hombros y me decían: ¿ como carajo quería el Acuerdo Social?. Mire esas dos fascinaciones como si estuviera loco, realmente loco, y dije con Justicia Social para el trabajador. Ambas fascinaciones se rieron como locas a carcajadas y desaparecieron de mi vista como si no hubieran estado jamás. Como si hubiera sido un Yaskydo de dedos. Por suerte vamos a reconstruir la esperanza de un PJ renovado. Si, nabo al cubo, el único que nos va a faltar es Quindimil, me gritaban de la tribuna los bombistas del Tula. Debí admitir que tenían razón, mira que ellos cobraron siempre, en las peores condiciones, en ese instante justo estuvieron, es decir a la hora de cobrar, y no palizas. El siete, como el marido, el numero perfecto, setenta veces siete, los siete pecados capitales, las siete maravillas del mundo, las siete plagas de Egipto, el siete de velos, en fin, que cabalístico todo. La muchacha también va por el siete de todos como el marido. Una verdadera amenaza, ahora que su popularidad como presidenta aumentó. Ahijuna pisen la raya.