LA IZQUIERDA COMO DIVISION INFINITA DEL PODER

LA INSOBORNABLE LEALTAD AL YO MISMO

Las corrientes progresistas tienen la capacidad de dividirse hasta el infinito. Tenemos el partido X, el partido Y al que formamos la Federación de Partidos XY que se lo dejamos a W y X e Y salen hacer un nuevo partido, porque entre las reacciones de los nuevos aggiornados o ellos no anquilosados siempre terminan superando el superador y superados por los superadores. Digámoslo de otra manera. Se formaron al grito de juvenil de:” Unidad de los trabajadores, y al que no le gusta se joda, se joda”. Todavía no hay comprendido el sentido de unidad, lo están tratando de entender y en el camino se fracturan, así es como Socialismos hay para el que les guste, Comunismos hubo para el que tenga, y centro izquierda es de un espectro tan amplio que ni el Baigon se anima a pelearle. Bien, pero esto era en política. Ahora tenemos la dicotomía progresista aplicada al sindicalismo combativo. Vamos a explicar si ex posible como se fractura la fractura, y todo por culpa del peronismo. Cuando existía la CGT debía haber un sindicalismo que expresara la totalidad de los trabajadores por encima de un proyecto político partidario. Era inaceptable que los gremios principalmente peronistas nucleados en la CGT se hicieran la voz única de lo que representaban, y no solo del radicalismo, sino del socialismo, comunismo, anarquismo, etc, etc. Con el tiempo y luego de la CGT de los Argentinos, las experiencias de Agustín Tosco, la Creación de Sitrac y Sitram, y el Sindicalismo Clasista y Combativo se fue perfilando una diferencia de concepción por encima de una unidad en la acción, fue así que se decidió hacer una Central Obrera, que más allá de su existencia como voluntad de construcción carece de margen legal, por ausencia de modificación de la Ley de Asociaciones Sindicales del nuestro País. Así nace la Central de Trabajadores Argentinos. Realmente se dedicó a ocupar el espacio de empleo estatal a partir de ATE, algunos gremios de industria menor y organizaciones territoriales sin estructura gremial y organizaciones de desocupados más ligadas a políticas sociales que a representación gremial, (según la ley de Asociaciones Sindicales Vigente) lo que le dio una representación legal difusa. Cuando en la última normalización los Sectores como el de la federación contraria a Atanasoff de Municipales de Sluga pidieron hacerla un poco más Kirchnerista, es decir, peronista a la violeta, fue donde De Genero y Claudio Lozano y a bajo protesto Yarsky pretendieron hacer un Partido Laborista que es volver por otra vía a la fuente de la que salió Perón. Ahora esta situación tiende a quebrar a la CTA en una interna. Aun no tienen la representación como Central y ya se van a quebrar. Todo un logro, esperemos que el sentido común pueda más, aunque uno desearía que no.