EVO MORALES - SOBISH. PARALELOS DE VIOLENCIA

NEUQUEN O HUANUNI UN MISMO ESCENARIO, NO HAY REPRESORES NI DE IZQUIERDA NI DE DERECHA, SOLO REPRESORES.

No controlar un conflicto popular fue, acaso, una de las cosas que aprendió, hasta ahora, Kirchner de los setenta. No tanto por no ser un violento, sino porque la violencia descalifica al represor. He aquí el caso de Sobish con la situación del docente Fuentealba el año pasado. Sea orden directa de Sobish o no, el caso que el entonces Gobernador Neuquino subió al Gólgota con la cruz de la muerte del inocente maestro por culpa de un violento. La política en democracia no se puede construir con represión. Por otra parte Evo Morales en los acontecimientos de Oruro debe enfrentar la responsabilidad política o directa de la represión de los trabajadores mineros de la Central Obrera Boliviana, cuyas consecuencias son dos muertos. Que si bien no son los únicos muertos durante la dura lucha dialéctica y poco consensuada historia reciente de Bolivia, son los más cercanos a la Revocatoria y en medio de una crisis político institucional que tiene casi paralizado a Bolivia. Evo solo pudo contestar, que Bolivia tiene reservas por 7.000.000.- de dólares, al Bono Juancito Pinto y a la Renta Dignidad. Se olvido decir de la inflación en Bolivia, de la falta de dialogo con las autonomías. Mientras tanto y a dos días de la revocatoria los mineros de Huanuni, porque llegarán a La Paz no sólo para exigir la aprobación de su proyecto de ley de pensiones sino para exigir que el Presidente “pida perdón por la represión y la muerte en sus filas”.
En esto de que ante la inacción se nos contesta con números nos parece una política calcada. No resulte ser que los mineros son la puta oligarquía.