EL PROBLEMA ES LA CORRUPCION, LA POBREZA Y EL DESPOJO DE LAS JUBILACIONES, ENTRE OTRAS COSAS.

EL NOMINALISMO VACIO DE CONTENIDO

No tengo oposición a que la gente se una como se le cante y que le devengan los derechos civiles que le correspondan según el vinculo deseado, cualquiera sea el genero. Esto es factico, no porque sea una concesión personal. Esta concepción fáctica me preguntaría si seria aceptable para los defensores del “matrimonio” gay si tienen la mas remota idea de la contradicción “in re” de que matrimonĭum tiene la raíz “matros” viene de madre y que madre no es otra cosa que un femenino. Que utilizar el nombre matrimonio y hacer nominalismo sobre el vínculo es casi una intolerancia intelectual contra el idioma y al mismo género de la especie, al dividir las palabras, no a las personas. Pero no basta que se garanticen la igualdad de derechos y obligaciones sino que lo que se pretende es avanzar hacia la superposición de roles y eso es lo que se puede entender que a un grupo de la sociedad puede llegar a molestar. Aun los poemas de Cibrián Campoy y la lucha de los casamenteros, lo importante es obtener los derechos, no los símbolos, o los atributos.