EL CELS MARCA LA CANCHA PERO NO ARREGLA UN CARAJO

CUANDO LA QUEJA PARECE COMPROMISO

EL CELS viene peleándose contra todos los Gobernadores de la provincia de Buenos Aires en la Administración kirchneristas por el manejo de la Justicia y su administración. Está claro que ello involucra a los procedimientos judiciales, policiales y el servicio penitenciario, por un lado y el educativo y de contención social por otro. En ningún caso, se habla de una estrategia nacional, o se descarta que haya desde el gobierno nacional, una política de soporte. La CELS, mas allá de sus atributos Legales y Sociales y de la defensa de los derechos humanos que se le reconocen, no pueden ser ajenos a la desaparición de derechos humanos esenciales y que no atañen a gobiernos de las dictaduras. Como lo son aquellos a los que apunta Pérez Esquivel desde la Serpaj y que les ha escrito Cartas Abiertas al Matrimonio Gobernante en varias oportunidades. Por lo tanto la CELS, a un gobierno, no autónomo, dominado por la algarabía del diputado electo santacruceñopampeano Néstor Kirchner, porque no va a decirle a él que haga algo en todo sentido, en su carácter de Presidente del PJ, de diputado Nacional electo, y detentador del poder por todos visto y manifiesto. El CELS no se le van a caer los anillos por respaldar lo instituido como valores aceptados en una sociedad diezmada por el centralismo y el oportunismo de un gobierno megacefálico. No son con medidas parciales o con críticas a medidas del corto plazo donde se combata el asesinato oportuno de la población civil, cosa que urge al gobernante él su gestión día a día, sino en políticas de corto, mediano y largo plazo, para solucionar en lo posible la ruptura del vínculo social con un sentido de la dignidad que el pueblo tiene con la esperanza de una vida mejor. A eso el CELS parece que le interesa tres bledos.